martes, 31 de enero de 2012

Desnutricion



Me voy a dedicar a escribir
Las hojas póstumas de mis días.
A exprimirle la sangre a cada palabra.
...
Hasta que el alma.
Deshidratada.
Al fin descanse.

He visto morir a dios
Y su gente.
Arrancarse los ojos entre hermanos.

Padecí la soledad del abismo
Y ardí como el fuego
Cada noche.
Hasta hacerme insalvable.

Algún día,
Creí en el cambio.
Le preste al amor mi cuerpo.
Y me hice uno,
Con el universo todo.

Y al vivir,
Me fui gastando.
Fui cambiando mis sueños,
Por quimeras improbables.

Me canse.
Me arte de todo.
Y me fui.

Aunque siempre estoy volviendo.

En el recuerdo
De los que me conocieron vivo.

Como un rosal metálico
Brotando en el asfalto.