miércoles, 30 de junio de 2010

TIGRE DE MADERA


Vos venias
y yo me aleje.
No queriendo ser visto.

Agazapado entre los matorrales.
En guardia siempre.

Como un tigre viejo, herido
y maltratado.

Festejando la propia muerte.

En carne viva.

Ausente de los lugares
que nos vieron crecer.

Callando el aullido.

Esquivando lo vivo.
Y las balas de plata.

Manso ya de la locura.

Acariciando con las garras,
toda la virtud.
Acariciando nostalgicamente
pieles nuevas.

Imposibles.

Buscando el ultimo verano de amor.
Que ya paso veinte veces.

Revolcado en charcos,
que refrescan las heridas.
Y las hacen llevables.

Hasta la ultima agonía.

La del día que te diste cuenta.
Que para muchas cosas,
ya era tarde.

PORQUE SI

Te quiero en mi cama,
En mi vida, un día.

Para celebrar la magia.
Y que se suiciden los poetas.

Todos los poetas que
no somos nosotros.

Los que hablan del amor
en tercera persona.

Y nunca le ponen
el cuerpo a la noche.

Y que el encuentro sea devastador.
Y nos odiemos por siempre.

Por habernos amado solo una noche
y toda la tarde del domingo.

Hasta que te subiste al micro.
Y no callo ni una sola lágrima.

Pero el corazón, esbozo una sonrisa.

Por la complicidad vivida.
Por conspirar en favor del deseo.
Por no ponerle freno a las ganas.

Por seguir estando vivo.

miércoles, 16 de junio de 2010

VACIO

Jarras con lapices,
floreros vacios
y ausencias.

Casilleros perplejos,
dificiles de ser llenados.

7 vidas perdidas,
malgastadas.

En un mundo
carente de sentido.

Aquello que nos salva
tambien nos unde.
Y cuando volvemos a pararnos,
somos otros.

Jugadores noctambulos
heroes condenados.
Al destino de la vida.

Esencia en carne viva.
Siempre.

Misterio y mitologia del amor.

Siempre midiendo,
siempre mostrando la medida.

Y mas tarde, la nada.
Otra vez el vacio,
como una coraza.
Como un traje hecho
a nuestra medida.

Hasta que nos cansamos.

UNA VEZ EN NUNCA JAMAS

Siempre te llevas partes de mi
que crees tuyas.

Y partís con tu arrogancia,
la frente alta
y el culo al viento.

A buscar otros mundos,
en donde nunca encajo.

Y vuelvo a ser el visitante de lujo
de los confines de tu alma,
de tus muslos en V,
pidiendo que entre.

Pero me canse de armar valijas
y dormir en hoteles,
que nunca huelen a casa.

Y me jubilo de vos.
Por los años vividos.

Y no te reclamo ni me llevo nada,
mas que mi fe.
Con eso me alcanza.

Y si algún día te acordas como era
y me extrañas un poco.
No me llames.

Escribí un cuento,
con lujo de detalles.
Y empezalo así.

Una vez en nunca jamas,
existió el amor.