jueves, 23 de febrero de 2012

Verdeser



Verdeser de luz
De la estupida ilusión de amarte.
Alma que has nacido libre.
Y contaminas con tu esencia
Todo lo que tocas.

Increpándolo a destajo.

Sabes tu del viento sabio
Y de cómo desplegar tus alas.

Y quieres en tu vuelo eterno,
Llevarnos a todos.

A donde descansan los deseos
Luego de ser consumados.

Ausencia notable
De las horas
Cuando quedas ahí,
Callada y brillando.

Y yo me pierdo,
Pierdo el poder de mis sentidos.
Te lo regalo.

Y vuelo.
Así, siempre a tu lado.
En infranqueable transparencia.

Y en tus brazos,
Veo el mundo desde el cielo.
Pierdo el miedo.

Ya no existe la caída.

Cuando se ha llegado tan alto.

1 comentario:

Max dijo...

Cierto, muchos hemos pasado por eso, algunos hemos salido otros siguen ahi buscando su ocaso para poder amanecer. Gracias Juan Demian, me hiciste recordar aquel dìa que habia dejado tan atras